"Un restaurante que quiera deleitar a sus clientes necesita buena cocina, un servicio amable y eficiente y un diseño arquitectónico que cree un ambiente agradable", afirma Barbara Makowka, directora de Wälderhaus. El arquitecto Andreas Heller, que diseñó el extraordinario edificio de Hamburgo-Wilhelmsburg, añade: "Comer fuera es una experiencia emocional que va más allá del puro sabor. Se come con los ojos, por así decirlo".
Inaugurado en 2012, el Wälderhaus combina bajo un mismo techo un restaurante, un hotel, salas de conferencias y una exposición de experiencias forestales. El leitmotiv "bosque y madera" impregna todo el edificio: las tres plantas superiores, que albergan el hotel, están hechas íntegramente de madera de abeto. El tejado verde y toda la fachada de madera de alerce sin tratar, con sus plantaciones, ofrecen oportunidades de alimentación y nidificación a pájaros y otros animales pequeños.
La protección contra incendios era un reto especial. En el momento de la planificación, una construcción de madera de este tipo era una novedad para la que no existían normas de construcción. "Como las dos plantas inferiores contienen, entre otras cosas, una zona de reunión y una cocina totalmente equipada, tuvimos que construirlas en hormigón armado", informa Andreas Heller.