Staudi's, llamado así por el apodo de Sebastian en su infancia, abrió en 2020. Ahora, después de cuatro años, los clientes tienen que reservar con mucha antelación. Sobre todo los fines de semana, es difícil conseguir mesa de forma espontánea. Esto se debe también a que el chef no ofrece platos a la carta: hay un menú fijo con una selección de entre cuatro y seis platos, con opciones vegetarianas. Precio: entre 75 y 109 euros. Ocupa un nicho, dice Sebastián, "por encima de los restaurantes de moda en cuanto a calidad y precio, pero por debajo de un restaurante con estrella Michelin". Esto tiene buena acogida. Abre cuatro días a la semana, sólo por la noche. Es suficiente, dice este hombre de 33 años: "También queremos tener algo para vivir y de los demás".
... a su propio restaurante
El sumiller de Staudi, Stephan Körner, coincide en que se trata de un modelo pionero, sobre todo teniendo en cuenta la omnipresente escasez de personal. "La semana de cuatro días es el futuro de la restauración", opina. "Al menos si se trabaja con un solo equipo como nosotros". Mientras Sebastian es el maestro de la cocina, Stephan se encarga del servicio como director del restaurante. Y como sumiller diplomado, se encarga de que la carta de vinos esté perfectamente coordinada. Además, su segunda pasión, la coctelería, deleita a los clientes con aperitivos con cuerpo como el Negroni casero, envejecido en barrica desde el primer día.