Redefinir la carne: sustituto de la carne a partir de la impresora 3D

Y ese es precisamente el objetivo de la empresa israelí Redefine Meat. "Hemos desarrollado la línea de productos "New Meat" especialmente para el sector de la restauración. Para que los hosteleros puedan ofrecer a todos los comensales -ya sean veganos, halal o kosher- el placer de la carne. En nuestro caso, a base de plantas", explica Ulrich Strünck, Director Comercial DACH de Redefine Meat. Max Peters, del restaurante Bearclaw de Hamburgo, confirma que los productos vegetales son adecuados para el sector de la restauración: "Utilizamos la carne picada de Redefine Meat para nuestras hamburguesas". El producto también es bien recibido por sus comensales; incluso los clientes que suelen comer carne quedan gratamente sorprendidos. "Personalmente, no creo que sepa cien por cien a carne. Pero el sabor es muy similar y, por tanto, los productos son un buen sustituto", afirma el restaurador de Hamburgo.

La impresora 3D como nueva productora de carne

Desde productos desmenuzados hasta filetes de ternera, hamburguesas y salchichas de cerdo: las once alternativas cárnicas son veganas, algunas de ellas también halal y kosher. Además de los ingredientes, valores nutricionales y alérgenos, cada producto indica exactamente para qué dietas es apto. Para conseguir un auténtico sabor a carne, Redefine Meat desarrolla y optimiza los productos en colaboración con los mejores chefs internacionales y expertos en carne. A continuación se utiliza la impresora 3D: unas máquinas especiales imprimen varias capas de estructuras similares a hilos unas sobre otras para conseguir una consistencia similar a la de la carne normal. El material de impresión es una mezcla de proteínas vegetales, grasas, colorantes y aromatizantes. Sale de los "cartuchos de impresión" a través de tres boquillas. Cada boquilla contiene una mezcla distinta de sustancias que imitan las fibras musculares, el tejido adiposo y la sangre para acercarse lo más posible a la composición de la carne. Al fin y al cabo, no sólo el sabor, sino también la consistencia desempeñan un papel decisivo en los sustitutos de la carne. El requisito: debe parecerse a la carne animal tanto al cortarla con un cuchillo como al morderla.