No obstante, Kartenberg ya está trabajando en las próximas actividades en nuevas condiciones. "Por desgracia, no creo que podamos reabrir pronto", afirma Kartenberg en una entrevista con MPULSE en noviembre. Sin embargo, "muy pronto pondremos en marcha la venta fuera de casa y haremos algo por nuestros clientes". Se venderán platos clásicos como el boeuf bourguignon, la bullabesa o el jus' del "salsero" Chef Schulz para recoger o entregar a domicilio. Kartenberg también ha desarrollado una tienda online; con su "despensa virtual", ahora entrega "buenos sabores en stock" y se encarga de la facturación, el envío, el etiquetado y el marketing. Sin embargo, ninguna salsa o sopa de pescado de alta calidad por 10 euros salvará a un restaurante a largo plazo sin ayudas estatales, dice Kartenberg. Está de acuerdo con las restricciones relacionadas con el coronavirus "en nombre de un objetivo general". "Pero ahora esto
no es un negocio normal. No tenemos ferias ni eventos, tenemos una pandemia y aún nos quedan tres meses difíciles por delante" El restaurador cree que la situación debería al menos volver a ser como en verano, cuando era posible el funcionamiento regular de los restaurantes bajo estrictas condiciones de higiene.
En cualquier caso, su equipo seguirá de momento con jornada reducida, en parte para recargar las pilas para lo que está por venir. "Mi gente quiere trabajar. Yo digo: vamos a tomárnoslo con calma. Porque queremos, debemos y volveremos a pisar el acelerador a partir de marzo o abril a más tardar. Desde luego, ofreceremos el mejor menú "Irma" que hayamos tenido nunca, porque hemos estado trabajando a tope en él" Kartenberg dirige eins44, otro restaurante de comida informal en Berlín-Neukölln, junto a Irma la Douce desde 2014. No se hace ilusiones sobre el esfuerzo que ha supuesto en los últimos y próximos meses: "En primavera abriré de facto mi segundo restaurante por tercera vez".