¿Cuál es la vida útil de los aceites de cocina?
Lo primero es lo primero: el aceite de cocina no se conserva para siempre. Pero, ¿cómo saber si la botella sigue siendo buena? El factor decisivo es el sabor. Un sabor turbio, rancio, a veces incluso acre, combinado con un olor rancio indica que ese aceite de cocina debe desecharse. Un sabor amargo o picante no es en principio motivo de preocupación. Cuanto más temprana sea la recolección de las aceitunas, por ejemplo, más intenso será el sabor del aceite. Por lo demás, se aplica la siguiente regla empírica: los aceites refinados sin abrir pueden conservarse hasta dos años. Sin embargo, los aceites sensibles, como el aceite de linaza o el aceite de cáñamo, tienen una vida útil mucho más corta: sólo unas semanas una vez abiertos. Para que siga siendo comestible el mayor tiempo posible, el aceite de cocina debe guardarse en un lugar oscuro y fresco. Por cierto: aceites como el de colza, el de nuez o el de cáñamo deben conservarse en el frigorífico una vez abiertos.
Eliminación del aceite de cocina: ¿qué debo tener en cuenta?
No se tira como el aceite... Si los restos de aceite acaban en el desagüe, pueden convertirse en enormes grumos en el sistema de alcantarillado con fibras como trapos de tela y pañales, y obstruir las alcantarillas. Por este motivo, muchos ayuntamientos ofrecen contenedores de polietileno sellables en los que se pueden recoger los residuos de aceite de cocina y de fritura para después eliminarlos. Atención: si los aceites de cocina se eliminan de forma incorrecta, podría ser multado por una infracción administrativa.